martes, 31 de julio de 2012

POEMA 20


Puedo escribir los versos más tristes esta noche.

Escribir, por ejemplo, <<La noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos.>>

El viento de la noche gira en el cielo y canta.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.

En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.

Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.

Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como al pasto el rocío.

Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como al pasto el rocío.

Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.

Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.

Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.

La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.

Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.

De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.

Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.

Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos, 
Mi alma no se contenta con haberla perdido.

Aunque éste se al último dolor que ella me causa,
éstos sean los últimos versos que yo le escribo.

Pablo Neruda.

No te salves


No te quedes inmóvil 
al borde del camino 
no congeles el júbilo 
no quieras con desgana 
no te salves ahora 
ni nunca 
no te salves 
no te llenes de calma
no reserves del mundo 
sólo un rincón tranquilo 
no dejes caer los párpados 
pesados como juicios
no te quedes sin labios 
no te duermas sin sueño 
no te pienses sin sangre 
no te juzgues sin tiempo
pero si 
pese a todo 
no puedes evitarlo 
y congelas el júbilo 
y quieres con desgana
y te salvas ahora 
y te llenas de calma 
y reservas del mundo 
sólo un rincón tranquilo 
y dejas caer los párpados 
pesados como juicios 
y te secas sin labios 
y te duermes sin sueño 
y te piensas sin sangre 
y te juzgas sin tiempo 
y te quedas inmóvil 
al borde del camino 
y te salvas 
entonces 
no te quedes conmigo



Mario Benedetti

No te salves


No te quedes inmóvil 
al borde del camino 
no congeles el júbilo 
no quieras con desgana 
no te salves ahora 
ni nunca 
no te salves 
no te llenes de calma
no reserves del mundo 
sólo un rincón tranquilo 
no dejes caer los párpados 
pesados como juicios
no te quedes sin labios 
no te duermas sin sueño 
no te pienses sin sangre 
no te juzgues sin tiempo
pero si 
pese a todo 
no puedes evitarlo 
y congelas el júbilo 
y quieres con desgana
y te salvas ahora 
y te llenas de calma 
y reservas del mundo 
sólo un rincón tranquilo 
y dejas caer los párpados 
pesados como juicios 
y te secas sin labios 
y te duermes sin sueño 
y te piensas sin sangre 
y te juzgas sin tiempo 
y te quedas inmóvil 
al borde del camino 
y te salvas 
entonces 
no te quedes conmigo



Mario Benedetti

Mejor te invento



Estás alicaído, estás dudando, 
no te alcanzan las pruebas ni las preces,
 
cada Dónde te ofusca, y cada Cuándo
Recorres el confort, las estrecheces 
que quedaron atrás y es razonable
 
que reclames la vida que mereces,
las ventanas en paz, el techo estable. 
Pero yo, te confieso, prefería
 
(¿cómo querés hermano, que te hable?)
cuando tu vieja angustia estaba al día 
con la amgustia del mundo, cuando todos
 
éramos parte en tu melancolía.
Sé qué polvos trajeron estos lodos 
pero saberlo no es la mejor suerte.
 
Invetaré quién sos. De todos modos,
inventarte es mi forma de creerte.

Lo que necesito de ti



No sabes como necesito tu voz; 
necesito tus miradas
 
aquellas palabras que siempre me llenaban,
 
necesito tu paz interior;
 
necesito la luz de tus labios
 
!!! Ya no puedo... seguir así !!!
 
...Ya... No puedo
 
mi mente no quiere pensar
 
no puede pensar nada más que en ti.
 
Necesito la flor de tus manos
 
aquella paciencia de todos tus actos
 
con aquella justicia que me inspiras
 
para lo que siempre fue mi espina
 
mi fuente de vida se ha secado
 
con la fuerza del olvido...
 
me estoy quemando;
 
aquello que necesito ya lo he encontrado
 
pero aun !!!Te sigo extrañando!!!

Las primeras miradas



Nadie sabe en qué noche de octubre solitario,
de fatigados duendes que ya no ocurren,
puede inmolarse la perdida infancia
junto a recuerdos que se están haciendo.

Qué sorpresa sufrirse una vez desolado,
escuchar cómo tiembla el coraje en las sienes,
en el pecho, en los muslos impacientes
sentir cómo los labios se desprenden
de verbos maravillosos y descuidados,
de cifras defendidas en el aire muerto,
y cómo otras palabras, nuevas, endurecidas
y desde ya cansadas se conjuran
para impedirnos el único fantasma de veras.

Cómo encontrar un sitio con los primeros ojos,
un sitio donde asir la larga soledad
con los primeros ojos, sin gastar
las primeras miradas,
y si quedan maltrechas de significados,
de cáscara de ideales, de purezas inmundas,
cómo encontrar un río con los primeros pasos,
un río -para lavarlos- que las lleve.

Mario Benedetti


La Culpa Es De Uno.


Quiza fue una hecatombe de esperanzas 
un derrumbe de algun modo previsto 
ah pero mi tristeza solo tuvo un sentido



todas mis intuiciones se asomaron 
para verme sufrir 
y por cierto me vieron

hasta aqui habia hecho y rehecho 
    mis trayectos contigo 
hasta aqui habia apostado 
a inventar la verdad 
pero vos encontraste la manera 
    una manera tierna 
    y a la vez implacable 
    de desahuciar mi amor

con un solo pronostico lo quitaste 
    de los suburbios de tu vida posible 
lo envolviste en nostalgias 
lo cargaste por cuadras y cuadras 
y despacito 
sin que el aire nocturno lo advirtiera 
ahi nomas lo dejaste 
a solas con su suerte 
    que no es mucha

creo que tenes razon 
la culpa es de uno cuando no enamora 
    y no de los pretextos 
    ni del tiempo

hace mucho muchisimo 
que yo no me enfrentaba 
como anoche al espejo 
y fue implacable como vos 
    mas no fue tierno

ahora estoy solo 
francamente 
    solo

siempre cuesta un poquito 
empezar a sentirse desgraciado

antes de regresar 
a mis lobregos cuarteles de invierno

con los ojos bien secos 
por si acaso


miro como te vas adentrando en la niebla 
y empiezo a recordarte.


Mario Benedetti.